cancion oficial

martes, 13 de agosto de 2013

Num. 10


Algo había cambiado cuando abrí los ojos por la mañana.

Era la luz,  algo más clara aunque siguiera teniendo el matiz gris verdoso propio de un día nublado en el bosque.

 Comprendí que faltaba la niebla que solía envolver mi ventana.

Me levante de la cama de un salto para mirar fuera y gemí de pavor.
Una fina capa de nieve cubría el césped  y el techo de mi coche, y blanqueaba el camino, pero eso no era lo peor. Toda la lluvia del día anterior se había congelado, recubriendo las agujas de los pinos con diseños fantásticos y hermosísimos, pero convirtiendo la calzada en una superficie  resbaladiza y mortífera. Ya me costaba mucho no caerme cuando el suelo estaba seco; tal vez fuera más seguro que volviera a la cama.

Edward: Me gustaría saber que tanto piensas al ver la ventana.-sonrió.

Bree: Me da gusto que tu cabeza de vueltas sin mi respuesta.

Envolví mis manos sobre su cuello atrayéndolo a mí,  para darle un fugas beso y perderme en sus ojos, 

Edward envolvió sus manos sobre mi cintura atrayéndome más a él. A pesar del frio clima, y de él. Me era imposible no sentirme acalorada ante sus dulces caricias.

Edward: No quiero dejarte, me quedare contigo si tú me lo pides.

Beso dulcemente mi cabeza asiéndome estremecer.

Bree: No hay problema, tienes que casar, no voy a dejar que te mueras de hambre.

Edward: Debo protegerte, de todos.

Mire sus ojos suplicantes.

Bree: Estaré bien, además solo son una horas –sonreí. – vete ya, no hagas esperar a tu familia.

Edward: te quiero mi Bree-sonrió-

Beso mis labios dulcemente, para después quedar frente con frente mirando sus ojos, sus encantadores ojos.

Edward: Cuida de mi corazón, lo he dejado contigo.-Dijo antes de salir de la ventana para despedirse con una sonrisa y volverse a acercar a mí.

Bree: estará bien, el mío te seguirá a donde vayas.

Me beso dulcemente para así salir de mi habitación y perderse entre las capas de nieve.

Edward se había marchado, al igual que Feel. Él ya se había ido antes de que yo bajara las escaleras.  En muchos sentidos, vivir con él era como tener mi propia casa y me encontraba disfrutando de la soledad en el lugar de sentirme sola, pero cuando Edward estaba lo hacía más acogedor y perfecto.

Engullí  un cuenco de cereales y bebí un poco de zumo de naranja a morro. La perspectiva de ir a la reservación me emocionaba,  y me asustaba saber que la causa no era el estimulante entorno educativo que me aguardaba ni la perspectiva de conocer más de ella.

Si no quería engañarme, debía admitir que deseaba acudir a la reservación para ver a mi mejor amigo Jacob Black lo cual era una soberana tontería.

Después del día anterior cuando comimos con su padre y el mío, balbuceará como una idiota y me pusiera en ridículo, debería haberlo evitado a toda costa.

Además sentía que algo me ocultaba lo veía en sus ojos cada vez que preguntaba por Ángel.
Era plenamente consciente  de que jugábamos  en ligas diferentes, distantes. Por todo eso, no debería estar ansiosa por verle. Aunque me metiera en problemas con Edward por desobedecerle.

Necesite de toda mi concentración  para caminar sin matarme  por la acera cubierta de hielo en dirección a la carretera; aun así,  estuve a punto de perder el equilibrio cuando al fin llegue al coche, pero conseguí agarrarme  al espejo y  me salve. 

Estaba claro el día  iba a ser una pesadilla dulce.

Cuando llegue a la Push  y Salí del coche, vi el motivo por el que no había tenido percances. Un objeto plateado me llamo la atención y me dirigí a la parte trasera del monovolumen, apoyándome en el todo el tiempo, para examinar las llantas, eran finas cadenas entrecruzadas.

Feel había madrugado para poner cadenas en los neumáticos del coche. Se me hizo un nudo en la garganta, ya que no estaba acostumbrada a que alguien cuidara de mí, más que Edward, y la silenciosa preocupación de Feel me había pillado desprevenida.

Estaba de pie  junto a la parte trasera del vehículo, intentando controlar aquella  repentina oleada de sentimientos que me embargo al ver las cadenas, cuando oí un ruido extraño.

Me percaté de que alguien había a mi lado al oír una maldición en voz baja,  y era imposible  no reconocerla.

Jacob: Hola Bree  ¿cómo estás?-sonrió.

Bree: Hola, estoy bien y tú.

Jacob: Te vez hermosa-rio.

Intento contener la risa, era una manera de recibir a su mejor amiga.

¿Era un cumplido?

O caso era algún tipo de  burla…

Bree: también te vez bien-dije burlón.

Nos habíamos sentando en instantes frente a la casa, estábamos un poco distraídos tenía tiempo que no cruzábamos palabras y para mí era como si lo hubiese visto por primera vez.

Jacob: Creí que no te dejarían venir a verme-suspiro viendo al extraño bosque.

Bree: ¿Qué? –sonreí. Y lo mire.

Bree: De que hablas? , quien no me dejaría venir Jake.

Jacob: Tu Edward –gruño.

Tenía esa maldita impresión que Jacob podría sospechar algo sobre Edward pero sin embargo me limite a preguntárselo, prefería evitar que el aire se esparciera  la acomodación por parte de ambos.

Bree: Jake?..-suspire-, él es mi novio.

Si claro esta sí que era la contestación más estúpida jamás creada por alguien tan torpe.

Jacob: Eso ya lo sé.-me miro serio, para volver a mirar el suelo.

Habíamos quedado en silencio un par de segundos, hasta que Jake. Dio un suspiro tan hueco y profundo que me provoco verlo al instante provocando que mi piel se erizara.  

Bree: ¿Que sucede? – mire su cara.

Jacob: Nada.-Suspiro- Nada lo que pase es que creo que hay personas que están muertas en vida. Por amor.

Tarde segundos para entender lo que me decía. Pero no tuve éxito alguno.

¿A qué se refería?...

Bree: ¿Porque dices eso?..-dije con voz entrecortada.

Jacob: Es por Michael-dijo casi sin respirar-

Bree: Que le pasa?... Aun no supera a Ángel?

Mi estúpida intervención volvió a sonar, tan mal. Que prefería que la tierra me hubiese tragado. Como podía decir yo eso si tampoco podía superar que mi hermana no aparecía, teníamos que fingir ante los demás que todo aparentaba normalidad; Esa normalidad que esta capacitada para un ser humano.

Últimamente me daba desesperación no poder contarle a Jacob todo lo que pasaba a su alrededor. Me sentía como tonta fingiendo que mi novio y vampiro Edward era la persona más normal de mundo.

Jacob: Eh escuchado a Michael hablar por las noches, es como un sueño.-Me miro.

Jacob: Y está comenzando a asustarme. Me refiero a sentir el amor mucho más fuerte, no quiero sentir el dolor que siente él. ¿Comprendes?

Bree: ¿Por qué dices eso? Acaso Michael está sufriendo de lo debido.

Quería alegrarme de que Michael estaba sufriendo, pero no podía me estaba dando lástima que sufriera por su amada.

Bree: Debo saber qué tipo de sueños? –dije entrecortada

Jacob  me miro un par de segundos para volver la mirada al piso, sabía que esos sueños de Michael iban más allá de los normales, pero Jacob quería negarse a decirme.

Jacob: El, no duerme bien. Siempre tiene pesadillas. Los chicos ya no lo toleran dicen que es como si sus pensamientos fueran leídos por Michael.

Bree: Que sueña? –insistí.

Jacob: Bueno.

Suspiro para narrar.

Flashback

Michael: Al menos dime porque te vas? – dije serio.

Ángel: Esto no es algo que yo hubiera elegido entre mis tantas opciones Michael.

Michael: Debes decirme.

La tome de los brazos provocando que gimiera de dolor. Haciéndome sentir el peor de  los canallas a su lado.

Ángel: Basta¡¡¡¡ -gruñí de dolor- No me vuelvas a tocar de esa manera.

La amo tal como el primer día, porque me tenía que dejar aquí sin respuestas a mis incógnitas. A ese dolor que perforaba mi pecho como una daga ardiente incapaz de borrar.

Ángel: No eres tu-suspire frustrada.

Michael: Que?¡, No eres tu si no yo.. ¿No es cierto?

Ángel: Si, soy yo. Quiero estar aquí sola y sin ti.

Michael: No puedes ser tan cruel?-dije hincando frente a ella.

Ángel: Puedo ser tan cruel como sea necesario con tal de protegerte, porque te amo-suspire.

Michael: Regresaras? –dije tomando su mano.

Ángel: Yo….

Fin Del Flashback

Suspire, viendo la cara de dolor de Jacob narrar tanta cosa. Michael estaba sufriendo más de lo que debía sufrir una persona. No me agradaba Michael en lo absoluto pero tampoco me gusta que sufriera así. Quería poder ayudar pero mis malditas posibilidades eran remotas a comparación de un lobo.

Jacob: Siempre despierta cuando Ángel está a punto de decirle cuando llegara.

Bree: Son solo sueños-Aclare mi garganta.

Bree: Debo irme.

Me levante para dirigirme a Jacob.

Bree: vendré en cuanto pueda.

Jacob: Lo prometes?-suspiro.

Jacob: Te necesito.

Había jurando que mi rostro se había tornado rojo, evite la mirada unos segundos para mirarlo y sonreír.

Bree: Y yo a ti.

Lo había dejado, mi mente necesita aclararse.

¿Que era esto que sentía? .

Quería pensar en eso pero un ruido estruendoso había retumbado mi habitación. Me estuve quieta unos segundos, sabía que venía una pelea sin tregua alguna. La primera por desobedecerlo, la segunda por haberle mentido y la tercera por querer evitar un tema que ya se estaba a punto de abrir.

Bree: Me asustaste-dije pasible.

Edward: Fuiste a la reservación si mi permiso.

Bree: Lo necesitaba?-Gruñí.

Edward: No-suspiro.

Edward: pero él te ama Bree. Qué no lo notas?

Bree: Pero yo te amo a ti..

Lo abrase, para después mirar sus ojos.

Edward: Ángel podría ponerlo en contra mía, a pesar de lo que he hecho por ella.

Bree: Que?-dije con recelo.

Bree: Acaso te importa tanto?

Las miradas se habían esparcido demasiado, ahora era un secreto de él. Ahora era que le gustaba Ángel.
Me sentía más desquiciada que él, Estaba celosa de mi propia hermana.







lunes, 5 de agosto de 2013

Núm. 9 Parte 3 /Ultima


El día siguiente fue mejor… Y peor.

Fue mejor porque no llovió, aunque persistió la nubosidad densa y obscura; y más fácil, porque sabía que podía esperar del día. Y claro ya había regresado a casa no tuve que dar un sermón a Feel ya que Alice lo había hecho por mí.

Fue peor porque estaba agotada. El ulular del viento alrededor de la casa no me había dejado dormir.
Después de haber pasado tiempo con Edward y su familia tenía que iniciar de nuevo con los labores de la casa. Y darme un poco de tiempo para mí.

Así que había decidido volver a  leer Cumbre Borrascosas por placer, era la novela que estábamos estudiando en la clase de Literatura, y también era la favorita de mi hermana, Ángel. La echo de menos, esté mes era más intrigante desde que llegue.

Y en ello estaba cuando Feel llego a casa.

Había perdido la noción del tiempo, por lo que me apresure a bajar las escaleras, sacar del horno las patatas y meter el filete para asarlo.

Feel: ¿Bree?- grito mi padre al oírme en la escalera.


¿Quién iba a ser si no?, Me pregunte.


Bree: Hola, Papa, bienvenido a casa.

Feel: Gracias.

Colgó el cinturón con la pistola y se quitó las botas mientras yo trajinaba en la cocina.
Que yo supiera, jamás había disparado en acto de servicio.
 Pero siempre la tenía preparada. Mi hermana decía que de niña, le quitaba las balas al llegar a casa. Imagino que ahora nos considera  lo bastante maduras como para no matarnos por accidente, Y no lo bastante deprimidas como para suicidarnos.

Feel: ¿Que vamos a comer? – Pregunto con recelo.

Mi madre solía practicar la cocina creativa, y sus experimentos culinarios no siempre resaltaban comestibles. Me sorprendió, y entristeció. Que todavía se acordara.

Bree: Filete con patatas –conteste para tranquilizarlo.

Parecía encontrarse fuera del lugar de la cocina, de pie y sin hacer nada, por lo que se marchó con pasos torpes al cuarto para ver la tele mientras yo cocinaba.

Prepare una ensalada al mismo tiempo en que hacia el filete y puse la mesa.
Lo llame en cuanto estuvo lista la cena y olfateo en señal de apreciación al entrar en la cocina.

Feel: Huele bien, Bree.

Bree: Gracias.

Comimos en silencio durante varios minutos, lo cual no resultaba nada incómodo. A ninguno de los dos nos disgustaba el silencio, aunque cuando mi hermana aún estaba aquí era difícil estar en silencio, le gustaba hacernos hablar, supongo que era igual a nuestra mama en ese aspecto.

En cierto modo,  teníamos caracteres compatibles  para vivir juntos, y si esto era así.

¿Porque  eligieron mal mis padres? ¿Porque no eligieron a su hija compatible?


Feel: Y bien, ¿Qué tal el instituto? ¿Has hecho alguna amiga, ahora que tú hermana desapareció con Michael? –sonrió divertido.

Bree: Bueno tengo unas cuantas clases  con una chica que se llama Jessica y me siento con sus amigas durante el almuerzo.-Respondí mientras daba otro mordisco a la carne.

Feel: ¿Sabes?,- dijo mientras masticaba la carne.

Feel: No me siento tan preocupado, sé que Michael la cuida muy bien, él es un excelente chico, esperó que lleguen pronto.

Suspiro.

Feel: La extraño.

Bree: Si lo sé, ella es increíble-sonrei.Para volver a comer.

Aquel gran énfasis de Feel me había causado un dolor fuerte en el pecho.

Feel: Bree, me refiero a que con ella eh pasado 18 años, comprendes.-dijo dulcemente casi parecía cantarlo, para no hacerme sentir mal.

Bree: Entiendo.

Era el discurso más largo que había  oído pronunciar a Feel. Debía dolerle mucho en el fondo el hecho de que mi hermana no este con él, y que yo esté aquí a lugar de ella.

Después de ese discurso. Nos quedamos callados y terminamos de cenar. Recogió la mesa mientras me ponía a fregar  los platos. Regreso al cuarto para volver a ver la tele.

Cuando termine de fregar. Subí con desgana  a hacer los deberes de matemáticas. Sentí que lo hacía por hábito. Ésa noche fue silenciosa, por fin. Agotada. Me dormí enseguida.

El resto de la semana transcurrió sin incidentes. Me acostumbre a la rutina de las clases sin Ángel. Aunque quería poder acostumbrarme. Ya era capaz de reconocer los rostros de cada una de las personas del instituto.
 En clase de  gimnasia los miembros de mi equipo aprendieron a no pasarme el balón y a interponerse delante de mí si el equipo contrario intentaba aprovecharse las carencias. Así que deje  ese consumo  con gusto.

Todos los días vigilaba la puerta con ansiedad esperando ver a Ángel entrar por esa puerta, pero mis esperanzas ya eran escasas.

Hasta donde yo sabía, los miembros de la manada no sabían nada, Edward tampoco podía olerla. Intentaba no pensar en ella, pero no conseguía reprimir del todo la preocupación de que Michael y yo fuéramos los culpables de su ausencia, por muy ridículo que pudiera parecer.

Feel  no estaba acostumbrado a quedarse en una casa habitualmente vacía, y lo pasaba en el trabajo. Limpie la casa, a veces en mis deberes Edward me ayudaba, pero tenerlo cerca y observando cada uno de mis movimientos me era difícil concentrarme. El sábado fui a la biblioteca fui sola ya que los Cullen tenían que casar.

Tenía pocos libros, por lo que no me importo hacerme de la tarjeta de socios. Pronto tenía que visitar Olympia o Seattle  y buscar una buena librería.

Me puse a calcular con despreocupación cuanta gasolina consumiría el monovolumen y el resultado me produjo escalofríos.

Durante todo el fin de semana cayo una lluvia fina, silenciosa, por lo que era excitante tener a mi novio conciliando mi sueño.

EN LA PUSH


Malditos pensamientos traje  para mí mismo. Tenía el dolor de cabeza  no tenía nada para calmarlo, necesitaba de ella.

Durante este mes me habían ya parecido siglos, por muy estúpido que suene, sin ella ya nada tiene sentido. Mucha gente me saludo el lunes por la mañana, tal perecía que creían alegrarme pero el contrario, para mí era como si tuvieran lastima de alguien que había perdido al amor de su vida.

Había perdido la noción del tiempo, tuve que dar un par de golpes en mi frente para poder reaccionar. Tenía que controlar cada uno de mis pensamientos, según Sam, ya lo estaba hartando con mis impertinencias.

Lo que ellos no podían comprender es que Ángel era mi vida entera, no solamente la amo y estoy enamorado.

Va más allá de eso, mas haya de todo lo que la conforma.

 Estoy  Imprimado.

Amarla es poco, la imprimación va más allá de todo, mas haya de mí.

Cuando la vez, tu centro cambio, ya no es la tierra la que te sujeta. Ya no importa nada, solo ella.
Si Ángel no hubiera me hubiera querido como yo a ella.

Eso no hubiera importado, yo hubiera sido lo que ella necesitara. Un amigo, un protector. Quién sea que ella necesitara. Amarla era y será todo para mí.

La podía oír…

 Michael: La oigo pensar –dije para mí mismo.

Había alegándome de todos, tenía que estar solo, pensar.

Esto me estaba siendo demasiado imposible, no podía aceptar la muerte de Ángel, todos decían que ella ya no estaba y que oírla pensar, solo era producto de mi imaginación.

Durante este momento había sentido un escalofrió recorrer todo mi cuerpo, lo cual me hizo acordarme de mi princesa, de Ángel.

Me puse a recordar sus besos, sus carisias, cada vez que la hacía mía la penetraba y la hacía gozar.
Cuando la hice mía por primera vez. Pasar de una pelea a decirle que era el amor de mi vida.

Flashback

Todo el camino se estuvo en silencio. Michael no sabía ni que decirle.. Y menos con lo que le hacía sentir Ángel desde el primer día en que la vio. Y es que todo para él era confuso.

 ¿Por qué se sonrojaba así? ¿Por qué con ella?

Michael siguió caminando no se dignó a esperar a Ángel. Solo camino a la casa, y entro.
Ángel se quedó desconcertada por la actitud de Michael, pero..

¿Por qué no la espero?

 Michael no quería sentir tan cosa, pero era imposible estaba imprimido.

Ángel entro a la casa. Tenía la oportunidad de haberlo dejado por su falta de caballerosidad, pero no lo hizo, por una simple cosa, el. Sabía todo de él, sabía quién era.

Un Lobo.

Ángel: ¿Qué te pasa? –Pregunte  un poco confundida por esa actitud que tomaba .

Michael: Nada, no me pasa nada –dijo seco

 Había caminado hacia la cocina, abrió el refrigerador y saco una cerveza, la abrió y camino al sofá, se sentó en él y prendió el televisor sin prestarme atención.

Ángel: ¿Nada? Michael ¡Estas actuando tan raro y estúpido! ¿Qué hice mal? –Pregunte frustrada.

Michael:  ¡Nada Ángel! –Susurro al final y cerró los ojos, dando un trago a su cerveza.

Ángel: Pero, la que debería estar así soy yo. Es tan rápido saber quién eres-suspire frustrada.

Ángel: Odio tu maldito comportamiento-suspire.

Michael:  ¡Basta!

Dio un golpe en la mesa  frente al sofá, provocando que me exaltara triste.
Se levantó y camino hacia su habitación. Lo cual me hizo seguirlo.

Ángel: ¿Entonces porque me evitas? – grite triste.

Michael: ¡Joder! ¿Quieres saber que tengo? –Le dijo cabreado.

Ángel: ¡Sí! ¿Por qué crees que lo pregunto eh? – dije fastidiada.

 Michael:  ¡Lo que pasa es que me muero por besarte! –me afirmo.

Me había quedado perpleja , sin saber que decir.

Ángel: Creo... Qué... Debo irme... a mí. Casa–Conteste nerviosa evitando su mirada.

Tome la manilla de la puerta realmente ruborizada, ante su confesión.
 Estaba a punto de salir cuando Michael lo había impedido.

Michael: ¡No te vayas! –me dijo entre susurros.

 Me  pego a la pared, nuestro cuerpo se pegó, y podría decirse que parecíamos  uno solo.

Ángel: ¿Qué... Que haces? –Balbucee mirando sus labios tentadores.

Michael: ¿Qué quieres que haga  mi princesa? – me Murmuro en mi oído provocando estremecerme.
Coloco sus manos en mi cintura.

Ángel: No... No... –metió sus manos dentro de mi blusa para así enterrar su nariz en mi cuello.

Michael: ¿No qué? –Le susurro, y mordió su cuello.

Ángel: No –Suspire excitada- se... No se.

Michael: ¿Quieres?–Empezó a pasear su nariz por su cabello, por su cara- Hacer algo en especial?

Me susurro lento pero sensualmente.

Ángel: Quiero hacer lo que estás pensando en estos momentos

Lo mire mordiéndome los labios, me estaba bloqueado pero lo deseaba tanto. Atrapé su cuello  acercándolo a  mí, ahora si para poder besarlo.

Su boca se abrió para mí, fue un beso lento, pero a ella... le encantaban esos besos, los lentos

¿Por qué?

 Ella decía que así lo disfrutabas más, que así se sentía mejor.

Michael la tomo de la cintura y la jalo hacia la cama, en un dos por tres, ella estaba ya tocando la cama con sus piernas, Michael la recostó lentamente y después se subió encima de ella.

Ángel: Michael –susurre agitada.

Michael: ¿Mmm? –Coloco sus manos en la orilla de su blusa, y comenzó a sacarla, cuando esta estuvo fuera del juego, Michael me había  acariciado los senos.

Ángel: ¿No me harás daño? –Le pregunto inocente, mientras lo miraba a los ojos.

Ángel: Me refiero  a que eres un lobo y yo una simple humana, no soy nada.- sonreí tímidamente.

Michael: No... –Suspiro- Nunca lo haría. Ángel tu eres todo para mí.

La había besado más fuerte con más pasión  le encantaba sentir  la lengua de Ángel, dentro de su boca.
 Michael empezó a sacarse la ropa, quedándose en unos bóxers, mientras Ángel   ya estaba desnuda ante mí, mis dedos estaban pellizcándole los pezones, mientras se arqueaba Ángel rosaba mi miembro Ya erecto.

Ella paseo sus manos sobre mi espalda, acariciando cada parte que tenía, aleje sus manos, Angel estaba a punto de protestar.

Pero enseguida metí mi lengua, y lambí uno de sus pezones

–Gimió-

Había comenzado a succionarlos, mientras una de mis manos bajaba a su vagina.
 Haciendo que esta se empapara por mis caricias. Metí  dos de mis dedos dentro de ella

Haciéndola arañar mi espalda, al sentir esas caricias...

 Esos dedos  salían y entraban dentro de ella. Abandone el pezón de Ángel  y bese su otro seno para así subir a sus labios.

 Que ya estaban anhelando que los besara.

Mordisquee su labio, mientras me acomodaba mejor.
Seguí  metiendo y sacando los dedos.

Ya quería que llegara ese momento donde la hacía mía, donde le metía mi pene hasta dentro, saco los dedos y la mire.

Amaba su mirada, cada una de sus facciones me hacían excitar mas. Amaba ser yo el que le provocara cerrar los ojos, de tanto placer que se estaba apoderando de su cuerpo gracias a mí.

Ángel: Michael – me susurro, pero esta vez... decía mi nombre entrecortado asiendo desear mas penetrarla.
  Ella quería más... Quería que la siguiera tocando.

Michael:  Dime.. –Le susurre y besando su mejilla, bajando por su cuerpo, por sus pechos... y por ultimo su ombligo.-tenía que excitarla más.

Ángel: Hazme tuya.. Ya –Le suplique.

Me senté en la cama recargándome a la pared, sentó a Ángel encima de mí pero aun sin penetrarla.
 Le acaricie la espalda, y después termine bajando mis manos, por ese hermoso, grande, y excelente culo.

Me acomode mejor, y de un momento a otro le metí el pene en una sola embestida.
Ángel  entre abrió la boca, y soltó varios gemidos... Dios nuevas sensaciones.

Para ella Y para mi igual... pero no nuevas sensaciones de placer.. Si no nuevas sensaciones, raras que jamás él hubiera pensado sentir.

 Ángel  empezó a saltar encima mí mientras yo le ayudaba con las caderas.

Michael: Móntame más

Ángel empezó a hacerlo un poco más rápido mientas yo sostenía de los hombros

 - Mas rápido..

Sentía como empezaba a chorear, como sus flujos empezaban a empaparle los muslos a ella y a mí, se había corrido antes que yo, pero segundos después yo lo hice, llenando a Ángel de su propio placer.

 Minutos después se había dejado de correr, salí lentamente, y no me había dado cuenta, que se había quedado dormida sobre mi hombro.

 La mire con ternura, estaba cansada.

La recosté en la cama, después  hice lo mismo quedándonos dormidos.

 Al día siguiente abrí los ojos de par en par, y mire a Ángel que estaba acurrucada en mi pecho, mientras su pecho subía y bajaba..

El cabello alborotado sobre la almohada, se veía tan tierna.

 Pasee la yema de mis  dedos por sus mejillas, después baje por su cuello y termine en sus hombros desnudos.

Nunca me hubiera imaginado que terminaría así con ella, y menos me hubiera imaginado lo que me hizo sentir..
de pronto se sonrojo.

Ángel abrió los ojos para encontrarse con los ojos míos,  sus mejillas estaban sonrojadas, ella sonrió de lado y me dio un beso en los labios.

Ángel: Buenos días –Murmure contra sus labios para volverlo a besar, pero esta vez le mordí el labio lentamente.

Segundos después  sentí algo que chocaba contra de mi entrepierna..

Michael estaba excitado.

Michael:  Y que buenos.. –Susurre acariciándole las caderas con una mano, bajo las sabanas.

Ángel:  ¡Eres un cochino! -sonreí.

Michael: ¿Yo? –Pregunte incrédulo.

Ángel: ¡Sí! No entiendo como a penas te despiertas y ya estas duro como roca –
Sonreí, pero al sentir como Michael me había pegado a él, haciendo que un ahogado gemido saliera de mis labios haciendo excitarme.

Michael: Tú lo has provocado... Él no se pone así por si solo –Le dije bromista
Ángel se rozó contra él.

 Angel: Michael –Le grite.

Michael: ¿Qué? –Le murmure al oído y empecé a besarlo, mientras el cuerpo de Ángel se arqueaba y le daba roses.

Ángel: Para.. –Gime- Aun es de día y bueno... Yo
 Fue interrumpida, cuando.. Michael me había penetrado de un solo movimiento-
Ángel: Mike–Jadeo.

Michael:  Se siente tan bien.. –Le susurre y me acomode entre sus piernas, y se las abrí.

Ángel: ¿Qué se siente tan bien? –Susurre rasguñando sus nalgas.

Michael: Esto –Y empecé a moverme dentro de ella, mientras Angel apretaba las sabanas con sus manos.

Ángel: Entonces... no pares –Le suplique.

Todo esto me daba felicidad dentro de mis propios pensamientos, hacerle el amor.
Eran solo recuerdos…
TO CONTINUE….


sábado, 3 de agosto de 2013

NUM 9 /Parte 2


Narra Ángel


Todos mis intentos de huida habían sido infructuosos .Aun con el corazón en un puño, mire asía afuera  de la cabaña donde me encontraba aun recordando  como Bree se apresaba a defenderme. Su intensa concentración no me mostraba ni rastro de duda, a pesar que Michael la superaba en número. Sabía que no podía esperar ningún tipo de ayuda ya que, en ese preciso momento, lo más probable era que los miembros de su familia lucharan por su vida del mismo modo en que yo quería hacerlo con las nuestras.

¿Llegaría a saber alguna vez el resultado de esta decisión? ¿Averiguaría que pasaría cuando todo se supiera? ¿Viviría suficiente para enterarme?

Las perspectivas de que eso sucediera no parecían muy halagüeñas.

El fiero deseó del destino de cobrarse con mi vida relucía en unos ojos negros que me vigilaban por obligación, a la espera de que se produjera el menor descuido para así librarse del pacto que habíamos hecho y ese sería el instante en que yo moriría con toda certeza.

Legos, muy legos, en algún lugar del frio bosque, aulló un lobo.
EL amor de vida…..

No puedo sentir esto… decía para mí misma en mis pensamientos, creo que es la necesidad. Lo volvía a repetir, hace un par de semanas me sentía intacta. Sin necesidad de cambio para poder huir asía otro tipo de lugar, podía oír los pensamientos de Mike su lobo interno me está matando.

Sabía que era una forma correcta, a mi manera de pensar tenía miedo, miedo de causar más problemas.
Podía imaginármelo lleno de rabia y angustia, tenía miedo de las reacciones que tomarían cuando supieran que todo esto de mi posible muerte era una farza.

Mientras reflexionaba hacerla de todo ello, capte el olor inconfundible de la persona que quería como hermano, mire de reojo y traje saliva enseguida tenía miedo.

Ángel: Como llegaste? …Volviste a oír por las puertas Jacob – le pregunte.

Jacob: No sé de qué me hablas – gruño.

Jacob: Temes que le diga a los demás, no te preocupes no diré nada, lo se todo. – Inquirió sentándose en una silla.

Estaba perpleja. ¿Sabría todo acaso?  ¿Y a que se debía la actitud tan pasible?  Edward todavía no había llegado. Por lo general ese tipo de respuestas las esperaba de él, no de Jacob que es más impulsivo.

Seguía rumiando el término  ´´ No le diré nada a nadie ´´  con esa tención habitual mientras lo veía sentándome frente a él. No era la palabra correcta, para nada. Se necesitaba un término más expresivo para el compromiso que estaba diciéndome, pero las palabras como ´´ Tranquila´´  sonaba muy mal  cuando las usaba en una conversación común con Jacob Black.

Jacob no tenía nada en mente, y ese vocablo era el origen de la tensión que yo sentía.

Ángel: Me perdí de algo? Acaso tú no eres muy impulsivo? – repuse con calma.

Jacob: algo así, solo se todo, sé que no quieres ver sufrir a Bree ni a Michael, yo aria lo mismo.









Al fin había dándome cuenta Edward no le había dicho nada y Jacob tampoco lo había descubierto por fin pude respirar con calma.

Jacob: No quiero entrar en detalles pero, tranquila no diré nada.

Ángel: Gracias-sonreí.

Jacob: te gusta Edward?

Esto me había ruborizado de inmediato.  Eso era algo que no le podía explicar. Iba con las normas de la gente normal.

Ángel: No, claro que no. Él también lo hace por Bree-sonreí nerviosa.

Jacob: No me importa- gruño.

Ángel: La amas mucho? –le sonreí.

Jacob: Mucho, pero ella a mí no.

Ángel: Podría cambiar de opinión-sonreí con cara de malicia.

Jacob: No la obligare – me miro con desaprobación.

Ángel: No la obligaras, ella misma se dará cuenta quien es mejor para ella-sonreí.

Jacob: Ella, salió a buscarte y dicen que cayó en un pozo- dijo con confusión.

Ángel: Que? –chasque mi boca y apreté mis puños.

Ángel: Creí que Edward la cuidaba- dije furiosa.

Jacob: Bueno creo que tú la tiraste antes al vació- la miro frunciendo el ceño.

Jacob: ella está bien, no deberías preocuparte, tú hiciste que todo esto pasara.


Ángel: ….. – Suspire con dolor a tan intrigante respuesta.





Narra Bree

Me sentía aun con un poco de dolor abdominal, sentía que mi cabeza estaba a punto de estañar comenzó abrir los ojos, y vi de inmediato  frente a mí una silueta que me miraba tensa.

Alice, la hermana menor pero muy terca aparto su vista asía afuera haciendo que yo volteara con ella. Alice acaricio con la mirada la reluciente pintura amarilla del Porsche.

Alice: Aun no he tenido oportunidad de conducirlo.

Suspiro.

Que estúpida, repetí para mí misma, había olvidado por completo, que Edward le había prometido a Alice regalarle el Auto si cuidaba bien de mí, y yo arruine eso, me sentía culpable.

Bree: Perdona- Conseguí soltar entre el castañeo de dientes.








Alice: Me parece que te caería bien una ducha caliente- dijo con brusquedad mientras se incorporaba a verme.

-Sí.

Ella frunció la boca y estudio mi rostro con cuidado.

Alice: Quieres hablar de ello?

Bree: No.

Ella asintió con la cabeza pero sus ojos relucían curiosidad.

Bree: Y Feel?

Alice: Tranquila, he hablado con él, no te preocupes.

Bree. Me siento bien con los cuidados de todos ustedes, de verdad. No puedo irme a casa?

--- Reaccionó con una mueca.

Bree: No importa, Alice. Me quedare si esto te facilita las cosas.

Alice: Gracias.

En esos días  pude caminar un poco aun me dolió parte de la espalda. Cuando caminaba.
Este día me acosté temprano y volví acurrucarme en el sofá de Edward.

Aún era de noche cuando desperté. Estaba a aturdida, pero sabía que todavía no había amanecido. Cerré los ojos y me estire, rodando de lado. Necesite unos momentos antes de comprender que debería haberme caído de bruces con aquel movimiento, y que, por el contrario, estaba mucho más cómoda.
Retrocedí en un intento de ver a mí alrededor. La oscuridad era mayor que la de los días anteriores. Las nubes eran demasiado espesas para que la luna traspasara.

---- Lo siento- Murmuro el tan bajito que su voz parecía formar parte de las sombras-. No pretendía despertarte.








Me tense a la espera de un estallido de furia de su parte y por la mía, pero no hubo más que la paz y la quietud de la obscuridad de su habitación. Casi podía deleitarme con la dulzura del reencuentro en el aire, una fragancia diferente de la de su aroma de su aliento. El vació de nuestra separación dejaba de su propio regusto amargo, algo de lo que no me percataba hasta que se había alegado.

No saltaron chispas en el espacio que nos separaba. La quietud era pacifica, no como la calma previa a la tempestad, si no como una noche clara a la que no le había afectado el menor atismo de la tormenta.
Me daba igual que debiera estar enfadada con él. No me preocupaba que tuviera que estar enojada con todos. Extendí los brazos asía delante, halle sus manos en las penumbras y me acerque a Edward cuyos brazos me acunaron contra su pecho. Mis labios buscaron a tientas los suyos por la garganta y el mentón hasta alcanzar su objetivo.

Me beso con dulzura durante unos segundos y luego rio entre dientes.



Edward: Venia preparado para soportar una ira que empequeñeciera la de los osos  pardos, Y ¿Con que me encuentro? Debería hacerte enojar más a menudo.

Bree: Dame un minuto para que me prepare- bromee mientras lo besaba de nuevo.

Edward: Esperare todo lo que quieras- Susurraron sus labios mientras rozaban los míos y hundía sus dedos en mi cabello.- y extrañaba tu olor

Bree: pareciera que hubieras olido algo , siempre dices eso cuando están cerca de un lobo- lo mire entre las penumbras.

Bree: Acaso?... estuviste con uno-suspire en su pecho-.

Sentí su cuerpo más tenso ante mí, que hacía que me apretara más contra él.










Edward: No debes confiar en mi tanto Bree

Bree: Que?.. Acaso escondes a mi hermana- solté una risita –

Edward: No.

Soltó de inmediato para abrasarme Más.

Bree: confió en ti, tu jamás me mentirías-bese enseguida su cuello.

Edward: esperare algún día en la mañana, para que cambies de opinión respecto a mí.


Bree: Lo que digas.






Edward: Bienvenida a casa- dijo mientras sus fríos labios me besaban dejaba de la mandíbula-. Me alegra que hayas vuelvo.

Bree: Eso es genial.

Edward: Hum- coincidió mientras yo apretaba mis brazos en su cuello.

Su mano descubrió una curva alrededor de mi codo y descendió despacio por mi brazo y las costillas para luego recorrer mi cintura y avanzar por mi pierna hasta la rodilla, donde se detuvo, y enrosco su mano en mi pantorrilla.

Contuve el aliento. Edward jamás se permitía llegar tan lejos. A pesar de la gelidez de sus manos, me sentí repentinamente acalorada. Su boca se acercó a la base de mi cuello.

Edward: No es por atraer tu cólera antes de tiempo-murmuro-, pero ¿ te importaría decirme que tiene de malo esta cama para que la rechaces?


Antes de que pudiera responder, antes incluso de que fuera capaz de concentrarme suficiente para encontrarle sentido a sus palabras. Volvio a besarme.

……

Ángel: Edward no ha venido, quiero preguntarle de Bree-mire asía la ventana.

Jacob: Te importa bree oh es que ya quieres verlo?-sonrió .

Ángel: No seas estúpido Jake

Jacob: Supongo que el prefiera estar con ella, porque te fuiste?

Ángel: porque debía proteger a mi hermana, es algo que no te puedo contar.

Jacob: ya lo sé-dijo con desanimo.

Ángel: Quiero que ella sea feliz

Jacob: lo que sucede es qué te está gustando Edward, acaso no estas ardiendo de furia, lo siento Ángel..

Ángel: no es eso-dije frunciendo el ceño furiosa.

Jacob: Temes que Michael se quede con ella y se olvide de ti.

Ángel: No es cierto, Jacob –suspire-, el me ama tanto como yo a él.

Jacob: Deberías regresar, oh Bree podría quitártelo.

Ángel: tu deberías dejar al lado este intento de macho, que no te queda, estas aquí, mientras Edward podría hacerle el amor a Bree, antes que tú.

Jacob:














 Sonrei maliciosa ante mi respuesta , ya que era totalmente estupida, pero.Esos intentos de Huida era innecesarios, tenía que regresar, tenía que ver a Michael.Temia que Jacob tuviera razon.


TO CONTINUE…..



viernes, 19 de julio de 2013

Num. 9 / Primera Parte


Que se podría esperar de la vida? ….. A mi parecer nada, siempre quería alegarme de las personas que quiero, ahora estando frente a ella viéndola postrada en una cama sin ninguna señal de vida me sentía más impotente que nunca no sabía qué hacer. No sabía que elegir, desde que Carlisle nos dio la noticia, quedamos con la mente fría  sin nada en que pensar   todo pasa rápido, No te avisa el tiempo, el destino está precisamente y  en contratiempo Michael no había levantado la cara desde la noticia, yo estaba junto al pecho de Edward sin decir ni una sola palabra.

Los demás lobos estaban detrás de nosotros, todos teníamos que pensar,  o más bien. Nos tenían que ayudar a pensar. Los Lobos y los vampiros habían elegido una tregua mientras Ángel sanara, después todos seguirían siendo enemigos así lo había planteado Sam el Alfa de la manada.
Con respecto a Las decisiones asía mi hermana solo Michael y yo podíamos elegir, los lobos se fueron a descansar y Carlisle se fue a casa, el único que se quedó conmigo era Edward y Michael. La tensión acaparaba toda la habitación donde Ángel se encontraba, no se movía, solo dormía.

Bree: Elijo a mi hermana – fue lo único que se pudo pronunciar de mis labios, en cuanto lo hice cerré los ojos, para después ver a  Michael que me miraba con desaprobación yo solo apreté la mano de Edward para tomar un poco de su fuerza.-








Michael: No… Ángel elegiría a  su bebe  - se levantó viéndola con dolor – así que será mi hijo- me miro con lágrimas en sus ojos, para así borrarlas rápidamente para no ver su debilidad.-














Bree: Estas loco, no dejare que eso pase  antes me matas – lo mire con rabia no sabía que hacer me sentía desesperada no podría dejar que mi frágil piel de humana se debilitara ante un licántropo y menos si se trataba de defender la vida de mi hermana.

Michael: Estoy harto¡¡¡ – tapo su rostro y enseguida dejo la habitación – Y se termina la tregua con tus malditos chupa sangre ¡¡¡– se oyó a los legos estaba acabando con la tregua para Ángel, estaba completa mente loco –

 Tenía que entenderlo Michael estaba pasando por un mal momento, y tenia que comprenderlo, Edward me llevo a casa y se puso a mi lado para que pudiera relajarme y conciliar el sueño, pero me era imposible, Ángel estaba legos y yo no  podía acercarme. Michael lo había prohibido y yo no quería que Ángel se pusiera mal escuchando las peleas con su hombre lobo.

Bree: Hablaras con tu familia para que no se acerquen?, Me refiero a que no quiero que nada les pase - alce la mirada para tratar de verlo entre las sombras de la habitación –

Edward: Lo prometo – beso mis manos- tranquila todo estará bien, duerme Cielo aquí estoy

Había quedado entre sosillos dentro de mis pensamientos, tenía miedo. Miedo a que Ángel no despertara y con ella su bebe muriera, Michael y yo habíamos estado peleando en semanas  Edward había impedido que  Los cullen se acercaran a la Puhs para que no hubiera problemas entre las tribus ni sus treguas, estaba preocupada. Tenía miedo  Fell había creído mi mentira, piensa que su hija está de vacaciones con el salario que gano en ´´La cabaña Cluse´´ de la señora Evans, fue convincente… Bueno por un poco de semanas sus interrogatorios seguían.

Fell: Acaso no ha llamado Luí? – seguía atento a su periódico y su café de todas las mañanas esta vez no pude escaparme de desayunar con el – tiene familia , creo que debería venir asía acá , sé que tiene novio, y no me molesta pero ….. – tomo un sorbo de café, yo trababa de comer lento pero la angustia  me hacía comer rápido dio un pequeño suspiro y con él su mirada en mi – Bree








Bree: Te estoy escuchando papa , ella llamara, hable con ella , ayer .. y . .. am pronto va a venir ya es mayor bueno no tanto pero es libre , tengo que irme.- había sonado estúpida con la frases cortadas tenía que irme no sabia fingir y si me quedaba mas tiempo todo lo podia empeorar -

Me levante tan rápido que no me di cuenta de cómo me había mirado Fell, tome mi mochila y la puse en mi espalda y cerré la puerta.
La escuela no me había sentado bien desde que no veo a mi hermana la extrañaba todo esto me estaba volviendo loca..


CASA CULLEN

 Alice: Estas segura Bree – tomo mi mano helada para que yo me retractara pero no lo iban a lograr-

Bree: No tengo elección, no puedo elegir – di un suspiro  profundo que notaba mi preocupación-   Michael elegirá lo que le convenga, prometí dejarla y lo voy a cumplir.

Edward: No es necesario esa promesa, ella es tu hermana – me miro con los ojos más tiernos ante lo que dijo-

Bree: esa es mi decisión. – sabía que no tenía elección no quería elegir más-

 Todos los pensamientos se desbordaron, Michael había vuelto a entrar por la ventana de la casa de los Cullen.

Bree: Que haces aquí – lo mire con reproche en mi rostro – deberías estar con Ángel según tú la tregua se acabó, como vienes aquí y no respetas tu parte del trato.

Edward Y Alice se habían quedado intactos frente de mí, me incorpore con lentitud y me puse al lado de Edward tomando su mano y espere que contestara.

Michael: Ángel – al decir su nombre las lágrimas habían inundado su rostro como aquella última vez en que Ángel se había muerto en vida.-

Bree: Que sucede – mi voz había sonado más entrecortada que nunca tenía miedo a lo que fuera a decir-

Edward: No lo hagas – dijo mi novio con cara retadora- has lastimado a Bree y no dejare que lo hagas de nuevo.

Alice: Creo que es decisión de Bree, Edward – lo miro con cara paciente-

Edward: Alice no te metas.

Bree: Basta¡¡¡ - los mire a los tres me estaban volviendo loca-

Edward sabía todo, podía leer la mente , y Alice es mi mejor amiga  podía ver el futuro pero no podía verlo cerca de los lobos y había dicho algo bueno , era mi decisión de querer escuchar  a Michael , tenía miedo , miedo a lo que me pudiera decir.

 Bree: Que pasa con ella

Michael: No esta – agacho la mirada y para después depositarla en mí – despareció, lleva casi una semana perdida y nadie de la manada la encuentra.
Bree: 








Michael: Perdón - comenzo a llorar -

Bree: Que?¡ - me acerque a él con las lágrimas en mi rostro- y apenas lo dices , ahora si necesitas ayuda de nosotros¡¡¡ ahora si Michael – lo empuje con furia mientras el agachaba la cabeza-

Michael: 













Edward: Bree cielo calma – me tomo de la mano para alegarme de él y sentarme en el sofá junto con Alice -

Michael: Lo siento, fui egoísta perdón – miro a Edward – Ayúdenme sin ella me muero, no puedo vivir en un mundo sin ella.

 Había tenido que esperar semanas para decirme que mi hermana no aparece, tuvo que alegarme de ella cuando más me necesitaba y ahora me pedía ayuda, no podíamos negarnos, todos había aceptado, empezarían la búsqueda. Edward hace unos días se había puesto nervioso un poco alterado con los demás, conmigo seguía siendo normal, pero era más distante, no lo entendía.


Edward: Sabia que   aquí estarías – la mire con tristeza estaba tirada en el suelo frió y húmedo del bosque – tenía que asesorarme que los pensamientos que leía eran tuyos

Tenía que levantarla en mis brazos, Ángel  jamás me había simpatizado y menos con ese olor a perro mojado que tenían todos los de su clase. Tenía que reanimarla y la lleve a un lugar más cálido de ahí, la había puesto dentro de una pequeña cabaña que habitaba en medio del bosque, ahora  tenía que saber si les decía a los demás oh que podía suceder. Me había cansado de esperarla y leer su mente a la licántropo,  solo tenía pensamientos de Michael y me era desagradable, tenía que dejarla, tenía que ver a Bree necesitaba tenerla a mi lado.

Ángel: No te vayas – me incorpore lentamente- Edward no digas nada

Edward: Porque? – Suspire mirándola y sentándome a su lado- Bree está sufriendo  en que pensabas cuando te fuiste.

Ángel: Por favor, no quiero que Michael y ella peleen por mi culpa Edward  estaré aquí mientras nace mi hijo será pronto y me iré con ellos, eso fue lo único que pensé, en ellos.

Edward: Porque debería de ayudarte

Ángel: Te los suplico – empecé a llorar – por Bree

Podía rendirme? … Pues si, cuando se trataba de Bree no podía negarme era necesario, tenía que proteger al amor de vida , tenía que alegarla de todo esto.

Edward: Te voy a cuidar mientras nace tu hijo, lo haré por Bree solo por ella- la mire con una pequeña sonrisa-

Ángel: No te va a incomodar mi olor? – Suspire y sonreí– pues sabes?... estaremos igual tu olor hostiganté  me fastidia pero gracias , gracias por ayudarme .

Edward: Te voy a cuidar como Bree lo haría, te traeré de comer – me incorpore y Salí de ahí a una gran velocidad.-

Tenía que engañar a mi Hermana y a Michael era necesario no soportaba que se  discutirán por mi culpa, Edward fue noble al ayudarme, tuve que ponerle a Bree enfrente para que no dijera nada, tenía que alegarme un tiempo, mi hijo tenía que nacer.

Edward se había ido demasiado rápido, y en pocos minutos había regresado, me observaba comer, pero después agacho su  mirada, el sol había tocado su rostro, lo mire, mire como su rostro se reflejaban  diamantes, se veía apuesto.

Ángel: La amas mucho, para haber aceptado esto

Edward: me dijiste que lo hiciera por ella, Bree es mi todo, ella es mi vida es mi única razón para seguir con vida si es que estoy vivo- lance la sonrisa mas dulce y boba al hablar del amor de mi vida- es perfecta








Ángel: Y tú para  ella, ella te ama mucho, gracias Edward – suspire-

Edward: Tengo que irme, tengo que decirles que estas muerta – me incorpore lento y suspire – te veo  luego.

 CASA CULLEN
Carlisle: Nadie sabe nada ella

Alice: Y yo no puedo verla, sabes que yo no puedo ver el futuro de los licántropos –suspiro lento mirado el suelo-

Rosalie: Debe estar muerta

Esme: Rosalie cállate –la miro molesta

Jasper: nadie sabe nada, es imposible llevamos semanas así todos necesitan descansar

Emmet : Bree todo estará bien

Bree: Eso espero  - ´´ese espero´´ no me sonaba convincente, tenía miedo que Rosalie pudiera tener  razón y que Ángel estuviera muerta- La voy a buscar yo

Carlisle: No, no te vamos a dejar, a Edward no le gustara

Bree: él no está y yo quiero que nadie me detenga, nadie

Había partido sola  sin mirar los rostros de mi familia cullen, tenía que buscarla tenía que hacerlo Alice podía avisarle a Edward  lo que yo hacía y mis sospechas eran exactas Edward salto de un árbol para quedar frente a mí.

Edward: No lo harás- suspiro – no dejare que lo hagas entiendes.

Bree: Es mi hermana y la voy a buscar deje que ustedes la buscaran sin mí pero esta vez no lo haré.

Edward: No te voy a dejar es peligroso que andes sola por el bosque Bree tengo que protegerte




Bree: No me lo vas a impedir- agache la mirada para después volverlo a mirar,odiaba tener que pelear-                          eligió mi hermana , a ella.


Edward: Bree 


Gire dejándolo solo, mi respuesta era tan estúpida sabía que siempre seria el, Edward siempre será antes que nadie, pero creo que hoy había una excepción  camine por el largo bosque todo estaba más oscuro que de costumbre, y me sentía débil  necesitaba  a Edward conmigo, no podía ver más allá de las tinieblas que estaban frente de mí, tenía miedo la desesperación está llegando a su límite.

Edward: Bree -suspire mirándola partir sabia que no debía poseerla yo no era nadie para hacerlo pero tenia que protegerla si algo le pasara no lo resistiria-

Jacob : La dejas partir, no la amas demaciado ..

Gire rápidamente ahí estaba el , Jacob con cara de pocos amigos el amaba a Bree con una intencidad que me hacia despreciarlo.

Edward: Es algo que a ti no te importa Jacob - lo mire con asco-











Jacob : si claro , a mi no me engañas cuando le dirás que encontraste a su hermana , yo la amo demaciado y ella debe saberlo.- se giro y comenzo a caminar-









Edward:  Jacob la estoy ayudando la estoy protegiendo, por primera vez te dijo que si tanto la amas no dijas nada para protegerla, aslo por ella, por Bree y Angel es de tu familia la vas a traicionar ella te ha ayudado cuando mas lo necesitaste. Aslo por las dos Jacob













Jacob : 















Había caminado demaciado no sabia donde estaba exactamente, estaba perdida yo me sentía así.

Bree: Ángel¡¡¡¡¡¡ - gritaba lo más alto posible para poder ser escuchada por ella pero era en vano- Hermana Ángel¡¡¡¡


Tape mi rostro con el mis sosillos de dolor por mi maldita impotencia y mi estúpida debilidad, los ruidos se hacían más extensos en mi cabeza ya no podía ver más allá de las tinieblas el ruido me estaba bloqueando,  no sabía dónde estaba, estaba cayendo, mire una cascada de gran inmensidad el precipicio me era estúpido  a pesar de su gran tamaño. Miré al cielo y sabía que no estaba soñando  me había dejado caer en algo que no me importaba descubrir, cerré mis ojos y preferí dormir hasta caer en aquella y profunda cascada creó que esta vez sabría si Ángel estaba muerta, estaba dispuesta a morir con ella tenía miedo, no de caer aquí, si no de caer con mi debilidad, si ella estaba muerta quería morir con ella.


TO CONTINUE ……